La primera impresión definitivamente cuenta

Lo primero que uno piensa cuando le dicen matrimonio de día es vestido corto en tonos claros, maquillaje suave, accesorios y seguro se te pasa por la cabeza estampados que estan full moda y nada de vestidos vaporosos sino más bien casuales para que los accesorios hagan su parte y logremos la armonía deseada porque tu outfit tiene que gritar una palabra cool, fashionista, trendy o simplemente regia!!!.
No me preocupa ir de invitada a alguna fiesta, considero exitante la búsqueda del vestido, los zapatos, aretas como llaman los amigos colochos, vanites y todo eso, tampoco llevar el mismo vestido que alguna otra invitada, lo que sí me preocupa es llevar un vestido trendy a la recepción de la madre de un amigo especial....a la cual aún no conozco. Ushhhh

A ver existe una variedad de estilos y colores que no son precisamente de verano, sino por el contrario opacos que podrían ser una buena opción, eso sí las opciones metalizadas o lentejuelas las dejo más bien para una cocktail o recepción nocturna.
Veamos, considero al negro siempre un acierto ya sea en el trópico o en el polo norte. Recuerda que con el negro las texturas y los detalles son la clave para que sea un vestido distinto a uno típicamente negro. Sin embargo mi tono de piel no hace el match que quisiera con el negro así que descartado.
No hace mucho aprendí a amar el azul, desde el tono opaco hasta el electrizante color cobalto. Y por supuesto no puedo hacer a un lado los tonos pasteles y nudes son lo mas in del momento. O los lilas y hard pinky que no quieren pasar de moda y que por cierto adoro desde siempre. Listo me compré la idea y... si mentí cuando prometí no saturar con el rosa pues ahí voy de nuevo....

Y si se trata de estilos los vestidos de un sólo hombro o strapples son la nueva silueta para la alfombra roja así que puedo llevarla a mis eventos especiales sin problema: es elegante y sofísticado. Ya lo tengo casi todo ahora a buscar los accesorios, las medias panties porque eso sí aunque soportemos los rayos UV más intensos de la temporada se consideran un must, de modo que deberé buscar unos q se adecúen a las sandalias y claro lo más importante indagar si ese amigo sigue siendo especial dentro de algunos días... crucemos los dedos pues y les cuento prontito...
Kisses

Otros sitios, nuevos cuentos y más reencuentros...

Cristi es mi amiga del colegio. Con intervalos más o menos largos hemos sido amigas durante toda la vida. En su infancia, la recuerdo con cabellos templados, corajuda y sobria al vestir. Quizás era su manera de protegerse del mundo y como no si se trataba de la guardiana del grupo. De grande y después de poco más de 10 años hizo la que yo llamo su primera y gran mudanza al mundo real...ya la echabamos de menos

Raquelita, llegó a mi vida en época universitaria y llegó para quedarse, su estilo trendy y atrevido sedujo de inmediato así como su sentido del humor y búsqueda del amor verdadero en la que caminamos y tropezamos juntas.
Nile apareció en el grupo como la revelde sin causa. Relajada como ella sola y responsable del chacra look que paseabamos por las playas de Huanchaco y Delicias. Sus inseparables hojotas vieron rendirse a una decena de chicos que gustaban de su aire natural y atrevido.
Mientras eso sucedía yo había vivido en 6 casas distintas, estaba lejos de papá y mamá, y buscaba independencia. Por eso una de las primeras cosas que hice fue correr a las surf shops y llevarme lo que pudiera. La idea: lucir cómoda pero auténtica... aunque de tablas no sabía un soberano comino.

Conforme ha pasado el tiempo se han ahondado las diferencias en nuestros estilos de vida y porque no decirlo de vestir también. A la vez, se han acrecentado la comunicación y la complicidad. Cristi debe analizarlo todo al detalle porque sus desiciones afectan a un selecto grupo de muchachos por los que vive y muere. Raquel sigue temiendole a las palomas y toda ave que se le parezca pero también creyendo en el amor. Nile...vaya admiro a Nile nunca tirará la toalla y seguirá en su honda cool y relax. Y yo me lanzo de nariz a todo trapo que me seduzca y si se trata de un escaparate mejor.
En cambio puedo pasarme horas conversando y riendome con Cristi, de quien un amigo dijo alguna vez que era una de las pocas mujeres que lo animarían a asentar cabeza, con Raquelita (mi cómplice) y Nile que lo aguanta todo hasta mis abruptos intentos por cambiar su look.

Somos mujeres con más coincidencias que diferencias que comprendieron que no sólo el amor puede aliviar la soledad actual, sino tambien la amistad, y que la felicidad no es un derecho sino un combate diario que es preciso vivir en el momento en que se cruza en nuestros caminos.